En el acceso a la ciudad de Sáenz Peña fuerzas federales detuvieron en la ruta nacional 16 al segundo jefe del Escuadrón 1, Alejandro Alberto Quintana y al investigado por otra causa de narcotráfico, el también gendarme Walter Darío Ayala. Los dos llevaban tres panes de cocaína lo que hace un peso aproximado de casi cuatro kilos.

«Golpe al Delfín» se denomina el procedimiento logrado por los efectivos de la Policía Federal Argentina (PFA), ya que la droga incautada llevaba la imagen de ese mamífero y además, el principal acusado es un alto oficial de Gendarmería Nacional (GN).

La División Unidad Operativa Federal de Presidencia Roque Sáenz Peña concretó el procedimiento en el marco de «Verano con Vos», donde detuvieron la marcha de un Volkswagen Vento conducido por el jefe de Gendarmería, segundo en jerarquía a cargo del Escuadrón 1 Alejandro Alberto Quintana acompañado por Walter Darío Ayala, ambos con domicilio en la segunda ciudad chaqueña. Se investiga si la mercancía corresponde al «Clan Sosa» cuyos principales cabecillas se hallan prófugos desde hace varios meses.

Ayala está supeditado a una causa a cargo del juez federal de Resistencia Enrique Bosch.

Las detención de un alto jefe de la Gendarmería transportando cocaína de máxima pureza, reafirma cómo el narcotráfico ha atravesado las estructuras de las instituciones y de las fuerzas de seguridad, en medio de múltiples causas que son investigadas y que tiene como posible jefe de una asociación ilícita al exconjuez Miguel Aranda quien fue procesado sin prisión preventiva y a un ayudente fiscal de Narcomenudeo Ariel Peña, también imputado por el grave delito de connivencia con organizaciones criminales que operan en El Impenetrable.