La vida de los argentinos transcurre en las redes, hasta los escraches por no conseguir un poco de helado. En las últimas horas se hizo viral un escrache con devolución contra el periodista Martín Liberman que mandó al frente en Twitter a una heladería porque según él son unos chantas y no llenan el pote “estafando” a la gente. Pero, lo que no se esperaba era que venía con vuelto: “No sean como Liberman que cuando te negás a regalarle el helado te escracha”.
Todo está subido a la red social del pajarito en donde hay risas y comentarios que no dejan bien parado al devenido conductor televisivo que se “come” calificativos de “rata”, “llorón”, “caer bajo”, “papelón”, “mal periodista”, “mala persona”, “colorado ensobrado”, "es un pelotudo el colorado" y otros tantos que lo hicieron ser tendencia "vergonzosa".
No sean como Martin Liberman, que miente y cuando te negás a regalarle el helado te escracha. Ah, y encima odia a Messi, lo cual es peor que lo primero. pic.twitter.com/KMKUCOfBlk
— LadobuenO (@LadobuenoOK) May 16, 2023
@elcancillercom dice: “Wow, qué asombroso que alguien que se dedica a la crítica deportiva tenga un berrinche infantil por no recibir un helado gratis. Seguro que eso le da mucha credibilidad a su trabajo”.
@maxihinz no se quedó atrás con la crítica: “Alguien q le enseñe a Martín q los kilos van por peso y no por volumen”.
También lo llamaron “rata” al igual que al resto de los periodistas del rubro: @pomontero: “No hay periodista deportivo que no sea roedor. Ni uno”.
Están los que critican a la profesión que debe informar, pero que también debe comer, ya que la publicidad (público-privada) es el único ingreso atento a que las noticias no se cobran. Sin embargo, la gente no sabe de eso. Aunque hay que decir que la “práctica” de “manguear” no deja bien parado a nadie y menos, creíble.
El ejemplo lo deja en claro @Negro_Avila35: “Retrato del 'periodismo argentino'. Si me das un 'canje’ hablo bien. Si no me das te crítico”.
Y así decenas de mensajes que le piden que ponga el pote en la balanza, y los que consideraron el “escrache” como una buena publicidad de LadoBueno (la heladería) y se quedaron con ganas de ir a probar algunos gustos y otros hasta recomendar sabores.
Pero hay que decir también que habría otros clientes, con el mismo nombre de pila, que le pasó lo mismo que a Martín.
(N/R: No te dan publicidad, a seguir intentando. Dar vuelta de página, seguir generando valor y comunidad que la publicidad ya vendrá. La ignorancia mata al hombre)